lunes, 12 de agosto de 2013

Bueno, pues por fin he conseguido ponerme un poco al día con la saga de libros ambientada en Mundodisco. ¿Y quién me iba a decir hace poco más de dos años que me iba a gustar tanto esta colección de Terry Pratchett? Esta adicción me tiene entusiasmada. Y como para no. Mundodisco consta de 39 libros (que yo sepa y sin contar el cuento especial Where is my cow?, libro ilustrado que pienso comprar en cuantito lo vea en alguna tienda, aunque esté en inglés). Aún me falta mucho para estar completamente al día, pero por lo menos he conseguido terminar mi segundo bloque argumental. El primero fue la saga de La Muerte, el mejor personaje secundario de Terry Pratchett, y el segundo, La Guardia. Aunque hay varios arcos más: Rincewind o de Los magos, Las Brujas, Los Dioses, Moist von Lipwig y Tiffany Aching. Sin contar con las novelas cerradas e independientes, que son muchas.

Con respecto a la saga La Muerte (ya que estoy, pues voy a comentar un poco qué me ha parecido), decir simplemente que es la mejor colección de libros que existe. Si quieres comenzar a navegar entre las páginas que relatan todas las historias que giran en torno a Ankh-Morpork (una de las ciudades más importantes del disco), te recomiendo que leas primero la saga La Muerte. ¿Por qué? Pues porque La Muerte es un personaje muy recurrente en todos los libros de Pratchett. Es una buena manera de introducirse en Mundodisco, de conocer a otros personajes protagonistas de otras series, como Las Brujas o el mismo Sam Vimes de la Guardia. Esta Muerte, a diferencia de la Muerte que nos pintan en la vida real, es alguien cercano, tranquilo, que siente y que está dispuesto a ayudar a los muertos si éstos se quieren dejar ayudar. Destacan sus ojos azules y su gran pasión son los gatos.

Los libros de esta saga son los siguientes:

  • Mort: El primer libro de todos. Aquí conoceremos a La Muerte, un esqueleto que va ataviado con una túnica negra y lleva consigo una hoz. Sin embargo, el verdadero protagonista es Mort, un chaval que se ve en la obligación de convertirse en un aprendiz y acaba siéndolo de la mismísima Muerte. Ambos personajes se ven enfrascados en una serie de conflictos morales, éticos y filosóficos, en los que La Muerte se “convierte” en un ser humano y Mort, su aprendiz, en La Muerte. 
    La verdad es que, como primer libro, es una presentación digna de lo que es La Muerte. Su descripción choca un poco con la idea inicial que tenemos de La Parca, y más en este libro. ¿Quién se puede imaginar que La Muerte tendría problemas filosóficos relacionados con la vida de los hombres? Aunque físicamente puede parecer un ente sombrío, en realidad es alguien dicharachero, tranquilo y con un profundo sentido del deber… hasta que se mete de lleno en cosas mundanas y terrenales. Presentar la Muerte de esta manera es algo que me asombró. Y más aún el Más Allá, que varía según las creencias de cada persona. Quiero decir, según Pratchett, no existe el Paraíso o el Infierno, o el Limbo o cosas así para todos, sino para aquéllos que creen firmemente que existen. En otros libros (no sólo de esta saga), se presentan numerosas muertes y todas son diferentes entre sí. 
    Como libro está muy bien, y está entre los mejores de la saga, aunque no es el mejor (por lo menos para mi gusto).


  • El segador: Es el segundo. La Muerte, con Mort, comenzó a desarrollar una personalidad, algo que los Auditores, unos entes sin rostro ni forma determinada que deciden el destino de todo el universo (los que ponen las normas, vamos), no dudaron en denunciar al señor de las muertes Azrael. Como “castigo”, La Muerte se convierte en una especie de hombre, y acaba trabajando en una granja bajo el nombre de Bill Puertas. Al no haber muerte, en Ankh-Morpork los zombies resurgen y este fenómeno es investigado por los magos de la Universidad
    Este libro, aunque es muy interesante, sobre todo por la evolución psicológica de La Muerte, no es de las más fuertes de esta saga. Se da más protagonismo a los magos, gente que tampoco hace mucho en El segador y se presentan a los zombies. Según este libro, los no muertos y seres sobrenaturales ya vivían en la capital antes de que La Muerte desapareciera (recordemos que en otros libros aparecen hombres del saco, dioses, semidioses, vampiros, hombres lobo…), pero su número se había disparado drásticamente. 
    En pocas palabras, no es un libro demasiado destacable, pero sí recomendable para entender por qué en Ankh-Morpork existen los no muertos.


  • Soul Music: Es el tercer libro de la saga de La Muerte. Como viene siendo costumbre, La Muerte vuelve a desaparecer. Al igual que en Mort (libro que tiene mucho que ver con este y no diré por qué), la verdadera protagonista es Susan Sto Helit, quien se ve atraída por la historia y la vida de Buddy, un músico de Nellofelek (para que veáis un poco cómo son los libros de Pratchett, leed este último nombre al revés), que es capaz de crear una extraña música. 
    Este libro, para mí, es muy significativo, pues aparece por primera vez Susan Sto Helit, pero no con todo su carácter de señora seria. Aquí es una joven más bien “curiosa”, por decirlo de alguna manera. Sin embargo, pese a que acaba en situaciones paranormales, siempre busca una solución lógica y racional. Este personaje es uno de mis favoritos, no sólo por ser quien es, sino por todo lo que hace a lo largo de la saga de La Muerte.


  • Papá Puerco: Papá Puerco (algo así como un Papá Noel) ha desaparecido misteriosamente (vaya, ¡esto sí que es raro!), así que La Muerte ha decidido desempeñar su papel durante La Vigilia de los Puercos (Nochebuena). Si no lo hace, el sol no volverá a salir. Sin embargo, la muerte debe seguir existiendo, por eso pide a Susan (que aquí sí la vemos con todo su carácter de persona seria) que se haga pasar por La Muerte mientras elabora su nueva tarea. 
    Tenemos ante nosotros el mejor libro de la saga La Muerte. Por sus conflictos filosóficos, por ese pequeño análisis satírico acerca de los personajes que la gente crea para sentirse mejor o aliviar sus miedos, como el hombre del saco, el hada de los dientes y esas cosas. Susan demuestra estar a la altura de las circunstancias, no sólo elaborando el trabajo de La Muerte, sino descubriendo el origen de la desaparición de Papá Puerco. Por otro lado, tenemos a una Muerte que se siente feliz por repartir regalos a los niños vestido con el atuendo blanco y rojo montado en un reno tirado por cerdos con cascabeles. La imagen es tan absurda que es imposible no reírse. 
    Con este libro me enamoré de La Muerte, pues Pratchett intenta por todos los medios mostrar una Parca cálida, que, aunque nos acecha continuamente, no es tan fría como nos las han pintado.


  • Ladrón del tiempo: el último libro de La Muerte que se ha publicado en España y el último que he leído. Se acerca la hora del Apocalipsis y La Muerte se reúne con sus viejos compañeros, desempolvan sus monturas y se preparan para la gran cabalgada. Cinco jinetes surcarán los cielos para anunciar el fin del mundo. Sí, cinco. Porque en realidad son cinco y no cuatro como decían las escrituras. Mientras, Susan debe desenredar un misterio que tendrá que ver con la diosa Tiempo, los señores del tiempo, unos monjes que pueden controlar el tiempo a su voluntad y dos jóvenes. Volvemos a ver La Muerte no como un ente, sino como si fuera una persona de carne y hueso (sobre todo de carne), aunque aquí no es el protagonista. Tampoco Susan. Son los Monjes del Tiempo o los Señores del tiempo, concretamente Lobbsang y Lu-Tze, quienes deben impedir que Jeremy, el mejor relojero de Ankh-Morpork, construya un reloj que permita atrapar el tiempo.
    Conocemos a otro grupo de personajes, que también obtendrán protagonismo en otros libros (como en Ronda de noche, de La Guardia). Son una especie de monjes Shaolin que llevan consigo unos aparatos que permiten que el tiempo pase más rápido o más despacio, dependiendo de las circunstancias. Lu-Tze es presentado como El barrendero, un mindungui que se limita a limpiar el monasterio. Sin embargo, se trata de una leyenda entre los suyos. Está bastante bien presentar un nuevo grupo, ya que puede dar tanto juego o más que los propios magos. Espero que en un futuro Pratchett (padre o hija) saquen más partido de esto. O que saquen una saga de estos personajes. Podría ser interesante.

Como estoy viendo que esta entrada se está alargando demasiado, lo voy a dejar aquí. En otro post hablaré un poco de la saga de La Guardia, la última que me he leído y, más adelante, de las novelas independientes o de arcos argumentales más cortos.
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